la lluvia y yo.
Una tarde solitaria, cubierto con mi capucha recorrí las calles de siempre, con la ilusión confusa de obtener imágenes para no sé qué falso recuerdo, para no sé qué inútil musa. Soy leal y terco, me he dado cuenta: mi carácter nefelibata es un peso que llevo a todos lados, porque sueño y me doy cuenta, sueño con los ojos abiertos, escéptico y desencantado.
Lloverse...
saudade
P.D Te dejo el link del blog de un amigo que también toma fotos chidas: http://elfotorama.blogspot.com/
ResponderEliminar"Una tarde solitaria..." es para apreciarse cuando el lente logra captar en menos de un segundo la gotita del agua que se alebrestó tras el golpe de una piedrita o cualquier objeto más denso que esa gota, que sin importar su tamaño se convierte en el elemento visual más atrayente de tu foto :)
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